Para muchos planchar es una de las tareas más aburridas de la casa, y es una de las que más nos cuesta hacer. De hecho, es mucha la gente la que plancha sólo lo estrictamente necesario o directamente no lo hacen.
Por eso, cómo sabemos lo que te cuesta planchar hemos querido compartir contigo unos consejos para que se te haga un poco más sencilla esta tarea.
- Lo primero que hay que hacer es comprobar las etiquetas de las prendas, así sabremos cuáles se pueden planchar y cuáles no.
- Quita del montón las toallas y prendas que no se hayan arrugado durante el lavado. Así seguro que lo haces con más ganas después de ver cómo se ha reducido la cantidad de plancha.
- Humedece la ropa, así será mucho más fácil plancharla y que las arrugas se vayan sin esfuerzo, sólo tienes que pulverizar un poco de agua.
Si mezclas el agua de la plancha con un poco de colonia, además, disfrutarás de una agradable fragancia en tus prendas.
¿Cómo planchar todo?
– Antes de empezar mira si la base de la plancha está limpia, así te ahorrarás disgustos si se mancha la prenda mientras la planchas.
– Empieza por las prendas delicadas, la plancha está más fría y así te aseguras de que estarán protegidas.
– Toda la ropa se plancha al revés, con esto conseguimos que los tejidos no se dañen al plancharlos.
– En el caso de los pantalones, hay que hacerlo por delante y por detrás. La tela es más gruesa y necesitas más calor para deshacerte de las arrugas.
-Si tienes prendas de lana, para evitar que ésta se apelmace plánchala con un trapo por medio.
¿Cómo planchar las camisas?
Y cómo sabemos qué es lo más difícil de planchar, hemos querido contarte cómo hacerlo para que se quede impecable.
-Empieza por el cuello, pasa la plancha una y otra vez hasta que se quede lo más rígido posible.
-Cuando acabes con el cuello, pasa a los Lo más útil es usar el extremo de delante de la tabla.
-Si la camisa es de manga larga, continua por los puños. Primero por la parte delantera y continúa por la parte trasera.
-Continúa por la pechera de la camisa, si lo planchas utilizando la parte delantera de la tabla te será más sencillo. Esta parte es muy importante, ya que es dónde más arrugas se ven.
-Por último, la espalda. Esto es lo más fácil de todo. Ponla boca abajo y ve extendiéndola según planches.